Liderazgo consciente: la clave para ser una gran líder

Por: Nora Taboada

En el país, cada vez más mujeres ocupan puestos de liderazgo. De acuerdo con el estudio 2023 de Grant Thornton titulado Mujeres en los Negocios 2023: Los avances hacia la paridad, el 38 % de los puestos de alta dirección en México están ocupados por mujeres, comparado con el 33 % registrado en 2022, lo cual coloca al país en el puesto número 11 a nivel mundial.

Con base en esto, se vuelve más importante que las líderes del país adopten una psicología de liderazgo consciente, a fin de crear ambientes saludables, proteger la salud mental y física de los equipos de trabajo, así como proteger la funcionalidad y progreso empresarial. De lo contrario, se puede caer en el riesgo de prácticas nocivas que lleven al estrés laboral y a otras consecuencias relacionadas en primer lugar con el bienestar, y en segundo, con la reputación empresarial.

El liderazgo consciente se puede definir como un tipo de liderazgo que busca balancear la competencia profesional con el carácter moral y la plenitud de los involucrados, haciendo uso de la integridad como brújula, así como del desarrollo de fortalezas y del dominio del ego.

Esto significa que, para convertirse en una líder consciente, se debe comenzar con un profundo desarrollo tanto interior como empresarial que involucre los siguientes aspectos:

• Buscar, en principio, la plenitud personal.
• Mantenerse en constante aprendizaje y crecimiento.
• Trabajar en la Integridad, honestidad y autenticidad personales.
• Desarrollar un sistema en los centros de trabajo que fomente la atracción, contratación y fidelización del mejor talento.
• Crear valor para clientes, colaboradores y para el planeta.

Y no es todo, porque a estas estrategias a llevar a cabo para crear un liderazgo consciente, se deben agregar otras características personales a desarrollar, como la humildad, la empatía, así como la calidez y la fortaleza.

Humildad: Esto es, aprender a reconocer los errores y actuar en consecuencia con ese aprendizaje, aceptar las críticas o la retroalimentación del equipo, así como realizar los ajustes necesarios con base en esta información para ser cada vez mejores. Recuerda: una lideresa consciente nunca deja de aprender.

Calidez y empatía: Se refiere a la habilidad de conectar con el equipo a través de la sensibilidad y la cercanía, de ser capaz de demostrar comprensión por medio de intención, cuidado y preocupación. Esto se logra con la comunicación, con la escucha activa, así como por medio de la autenticidad y una brújula bien establecida de valores.

Un líder fuerte, pero sin calidez, difícilmente logrará obtener la confianza plena de su equipo de trabajo.

Fortaleza: No basta con la calidez, y en muchos sitios se pueden ver ejemplos de líderes demasiado laxos que no son respetados al cien por ciento por sus empleados. Por lo tanto, es necesario desarrollar fortaleza y confianza en uno mismo, es decir, la capacidad para posicionarse como alguien competente y fuerte para tomar decisiones y guiar al equipo.

Debes recordar que, al aplicar los conceptos de calidez y fortaleza, primero debes mostrar el primero y después el segundo, a fin de que el enfoque inicial sea lograr una conexión real con las personas a tu cargo.

Al convertirte en una lideresa consciente podrás entender las necesidades de tu equipo, cambiar o modificar estrategias desde un profundo conocimiento de las circunstancias, así como ser un ejemplo para los demás, a fin de despertar la motivación, el trabajo en equipo y la participación activa con nuevas ideas, ¡el cambio empieza en ti!