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De la lucha personal a la Gloria internacional

La historia de Gloria Zarza, una atleta paralímpica mexicana

En el emocionante mundo del deporte paralímpico, pocas historias resuenan con tanta fuerza como la de Gloria Zarza Guadarrama. Esta destacada atleta paraolímpica mexicana ha demostrado una y otra vez que la combinación de talento, trabajo duro y pasión puede llevar a la grandeza en los escenarios más exigentes del deporte. Con cada competencia, Zarza no solo representa a México, sino que también encarna el espíritu de perseverancia y dedicación.

“Para que quiero mis pies si he creado

mis propias a las para volar”

Hoy, tenemos el privilegio de sentarnos con Gloria para explorar su trayectoria y los momentos que han definido su carrera. Desde sus primeros pasos en el mundo del deporte adaptado. hasta sus impresionantes logros en las competencias internacionales, Gloria ha sido una fuente de inspiración para jóvenes atletas y admiradores por igual. Gloria ha demostrado que los límites solo existen si los ponemos nosotros mismos.

Gloria está a punto de participar en sus terceros Juegos Paralímpicos, un logro significativo en sí mismo. En Tokio 2020, puso la esperanza y llenó de emoción a toda a una nación al subir al pódium y recibir la medalla de plata en lanzamiento de bala en la categoría F54, apenas su primera medalla en paralímpicos después de su primer intento en Rio de Janeiro 2016. En esta ocasión, llega a París con la medalla de oro que conquistó en el Campeonato Mundial de Para Atletismo en Kobe, Japón, realizados en mayo de este año, que la han posicionado como la mejor del mundo en su especialidad.

Gloria Zarza comenzó su trayectoria en el deporte a los 22 años, un punto de partida que, a primera vista, podría parecer tarde. Sin embargo, para ella, el deporte no fue inicialmente una búsqueda de medallas o trofeos, sino una necesidad personal. Enfrentaba problemas de sobrepeso y ansiedad que afectaban su bienestar general. Fue entonces cuando, en su búsqueda por una vida más saludable, descubrió el deporte adaptado. A través del Centro Paralímpico Mexicano, encontró no solo una nueva pasión, sino también un camino para transformar su vida.

La vida de Gloria está completamente dedicada al deporte, y su rutina diaria refleja el inmenso sacrificio que conlleva ser una atleta paralímpica de élite. Cada día está meticulosamente estructurado: comienza con entrenamientos exigentes que demandan no solo fuerza física, sino también una gran fortaleza mental. Su dieta es rigurosamente controlada para optimizar su rendimiento. Gloria ha enfrentado momentos de agotamiento extremo y ha tenido que lidiar con el peso de la duda y el cansancio.

“A veces siento que ya no puedo más, pero mi pasión y determinación me impulsan a seguir adelante, demostrando que a pesar de las dificultades mi compromiso con el deporte mexicano es inquebrantable”

Durante su trayectoria, Gloria Zarza enfrentó desafíos financieros significativos que la llevaron a vender dulces y botanas para poder continuar con su entrenamiento. Sin embargo, el apoyo incondicional de una amiga cercana y la inspiración que le brindaba su hijo fueron fundamentales para mantenerla motivada. En cada competencia siente una emoción profunda al portar el uniforme y ver la bandera de México plasmada en él. Para ella, representar a su país en el escenario internacional no solo es un orgullo inmenso, sino también un símbolo del esfuerzo y sacrificio que ha puesto en cada competición.

Pero la vida de Gloria no se limita solo al deporte. Además de ser una atleta destacada, enfrenta el reto de ser madre. Su hijo, de 21 años de edad, es una parte fundamental de su vida, y aunque está profundamente comprometida con su carrera deportiva, debe equilibrar su tiempo y energía entre sus entrenamientos y sus responsabilidades como mamá. La dedicación que pone en su papel de madre refleja la misma pasión y esfuerzo que aplica en el deporte. A pesar de sus logros y habilidades excepcionales en el atletismo, Gloria ha encontrado obstáculos significativos en el ámbito laboral. La búsqueda de una oportunidad laboral ha sido una lucha constante, ya que el rechazo hacia las personas con discapacidad sigue siendo una realidad. Este desafío añade una capa más de complejidad a su vida, pero Gloria continúa enfrentándolo con la misma resiliencia que la caracteriza en el deporte. Es importante destacar que es estudiante de la licenciatura en derecho. Sin embargo, compaginar esta carrera académica con las exigencias de su entrenamiento deportivo ha sido un desafío significativo. La intensidad y el compromiso necesarios para sobresalir en el deporte a nivel internacional han complicado su progreso académico.

Gloria nos dejó ver que en el camino hacia la inclusión en el deporte paraolímpico aún enfrenta importantes desafíos. A pesar de los notables avances, persisten limitantes significativas como la falta de espacios inclusivos y la movilidad adecuada para personas con discapacidades. La cobertura mediática sigue siendo limitada en comparación con el deporte convencional, lo que puede restringir la visibilidad y el reconocimiento que merecen estos atletas extraordinarios. Estas barreras subrayan la necesidad de un mayor compromiso por parte de las instituciones, los medios y la sociedad para garantizar que el deporte paraolímpico reciba el apoyo y la visibilidad que realmente merece.

Po lo pronto, es una mujer que lleva consigo la esperanza de una medalla más para México, y en ese camino, continuar visibilizando los deportes paralímpicos y la inclusión de mujeres extraordinarias.

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